Entrevista al Dr. D. Félix González Yagüe (ACCIONA)
8 julio 2022
Arrancamos las publicaciones sobre Eficiencia en la Construcción con una entrevista al Dr. D. Félix González Yagüe, Director de Estrategia de ACCIONA. Una persona con un gran conocimiento del Sector de la Construcción y un firme defensor de la Economía Circular. Recientemente realizó una charla en el ámbito de la Cátedra Krystaline-UMH, que tuvo una gran repercusión en el sector, especialmente por sus planteamientos referidos a la Sostenibilidad. Queremos iniciar esta entrevista agradeciendo su disponibilidad y compartir su privilegiada posición en el Sector de la Construcción.
Pregunta: La primera pregunta casi obligada es ¿cómo ve el futuro del sector que atraviesa una situación muy excepcional, con la perdida de control de las materias primas y de las cadenas de suministro, la inflación de costes, etc.? Recordando la importancia del sector de la Construcción como motor de la recuperación tras el COVID19, ¿cómo ve desde su posición el sector y sus expectativas?
Respuesta: La coyuntura actual, común a todas las industrias, limita enormemente nuestra capacidad de predicción a corto plazo, pero debe servirnos para establecer acuerdos de colaboración con nuestros proveedores y clientes basados en la flexibilidad, la transparencia y el beneficio mutuo, desarrollando un sistema económico más fiable y robusto que el actual. Más allá de esta situación excepcional, estamos ante lo que Naciones Unidas llama una triple amenaza global, cambio climático, polución y pérdida de biodiversidad, y que deriva en su práctica totalidad de una actividad productiva, en la que nuestro sector tiene un papel muy relevante, con casi un tercio del consumo de materias primas y de la generación de residuos globales. Nuestro reto pasa sin duda por continuar proveyendo a la sociedad de los bienes y servicios necesarios para el óptimo desempeño de su actividad a la vez que protegemos los ecosistemas que la albergan, con un diseño positivo en términos de valor ambiental, unos usos urbanos compatibles con el ritmo vital del planeta y el aprovechamiento de la propia naturaleza como infraestructura resiliente.
P: La inflación indudablemente es un grave problema, especialmente si se convierte en estanflación, ¿de qué manera cree que afectará a los proyectos que se puedan iniciar y especialmente los proyectos en curso?
R: El resultado a corto plazo ya lo estamos viviendo, con numerosos retrasos y bloqueos en proyectos en los que la falta de flexibilidad entre las diferentes partes implicadas impide alcanzar soluciones de consenso. La lectura positiva de esta situación es que habrá una gran cantidad de nuevos proyectos que nazcan con el espíritu de colaboración y solidaridad necesarios para llevarlos a buen puerto.
P: En su día a día, qué considera más viable ¿Apostar por propuestas novedosas, siempre que sean de probada eficacia, o prefiere seguir los métodos más tradicionales, que son más conocidos y por tanto es más sencillo su conocimiento por parte de todo el personal? ¿Qué importancia tiene en un proyecto la búsqueda de soluciones innovadoras o de mayor eficiencia?
R: Creo que, de forma general, debemos ser capaces de llegar a desarrollar soluciones más allá de dogmas o fórmulas preestablecidas. En el día a día de cada uno de nosotros hay miles de acciones que llevamos a cabo gracias a la experiencia, los éxitos y los fracasos de nuestros predecesores. Pero con este mismo espíritu somos capaces de encontrar alternativas y mejoras, y la construcción no es ajena a ello. Si estamos hablando hoy aquí es gracias a las pequeñas aportaciones que millones de personas hicieron antes que nosotros, y no creo que exista ningún proyecto exitoso, sea cual sea el ámbito en el que se desarrolla, que no pase, en mayor o menor medida, por la innovación y la búsqueda de la eficiencia.
P: Como sabe, uno de los objetivos de la Cátedra Krystaline-UMH es analizar la eficiencia en el sector de la Construcción. ¿Cree que sería posible calcular el coste de los mantenimientos y reparaciones debidos a patologías relacionadas con errores o problemas constructivos? ¿Sería posible reducir los consumos excesivos si se mejorase la calidad y se aumentara la vida útil de las infraestructuras?
R: No solo creo que es posible, sino que además me parece imprescindible para la evolución del sector. El futuro cercano pasa, sin lugar a dudas, por la optimización de los tres flujos fundamentales de un proyecto constructivo: materiales, maquinaria y personas. De forma general, eficiencia, calidad y sostenibilidad, están íntimamente relacionados y la optimización en la gestión de estas tres áreas redunda directamente en la prolongación de la vida útil del activo y por tanto, en la reducción de su huella ambiental.
P: ¿Tal y como está de complejo este mundo, realmente cree posible un futuro próximo sin residuos, o es un objetivo a muy largo plazo?
R: El residuo no existe. Esto es algo que me empeño en remarcar porque en la naturaleza no hay lugar para los residuos, cada ser, cada acción y cada material tiene un fin y un lugar. El residuo es resultado de una ineficiencia en los sistemas productivos del ser humano y solo existe en ellos. El problema es que su existencia dificulta en gran medida la vida en el planeta, y su total eliminación debe ser nuestra máxima prioridad como responsables de estos procesos. La urgencia hace que sea un objetivo a corto plazo que técnicamente podría conseguirse, pero que necesita además de un consenso social, político y económico que lo enmarcan, desgraciadamente, dentro del largo plazo.
P: Según su experiencia, ¿Se van incorporando programas de control y vigilancia de los nuevos sistemas productivos?
R: Sin lugar a dudas. Un buen ejemplo de ello es la metodología BIM que según la Universidad de Stanford permite:
- Reducir un 40% la variación de presupuesto inicial.
- Reducir en hasta un 80% el plazo de estimación.
- Reducción de un 10% de costes relaciones con imprevistos.
- Reducción de hasta un 7% de plazo total.
Con las consiguientes mejoras en términos de control y vigilancia a todos los niveles.
P: Le hemos escuchado en diferentes intervenciones hablar del gap de la productividad. ¿Podría detallar brevemente en qué se podría aplicar al sector de la construcción con algún ejemplo?
R: A lo largo de las últimas décadas hemos visto como las industrias minera o manufacturera por ejemplo, vivían un despegue de la productividad, frente a una industria que, como la constructora, veía sus ratios estancados en este aspecto. Un buen ejemplo del camino que ya han seguido otras industrias es el de la digitalización que, en el caso de la construcción, podría permitir obtener mejoras de productividad de hasta un 20% basadas en la optimización de sus procesos y en la gestión de información que redundaría en mejoras de productividad de hasta 6 euros por cada euro invertido según el estudio de KPMG The value of Information Management in the construction and infrastructure sector.
P: ¿Cómo mediría el impacto de la industria de la construcción en el medio ambiente? ¿Cuál debería de ser el objetivo de reducción en el impacto energético y qué cambios deben ser requeridos para reorientar la industria a la economía circular y sostenible?
R: La huella ambiental de la industria de la construcción puede entenderse de forma muy intuitiva teniendo en cuenta que es responsable de alrededor de un tercio del consumo de materias primas, y de la generación de residuos y emisiones de CO2. Teniendo esta cifra en mente, los mandamientos de la industria deben pasar por:
- Desmaterialización: minimizar el uso de materiales a través de la industrialización y la construcción modular.
- Longevidad: alargar la vida útil de los activos a través de un diseño circular que permita desensamblar y recuperar materiales.
- Maximización de materiales secundarios y renovables, y minimización de uso de recursos naturales no renovables
- Concepción de activos de infraestructuras como sumideros de carbono y receptores de biodiversidad.
P: ¿Qué opinión le merece la bioconstrucción? y a este respecto, ¿cree que se habla más de lo que se hace?
R: La bioconstrucción no es sino la vuelta a los orígenes de nuestros primeros proyectos como civilización, que en algunas regiones del mundo nunca han dejado de existir. En el estado indio de Meghalaya se construyen desde hace cientos de años puentes con vidas útiles superiores a los 500 años con las raíces de los numerosos árboles de caucho presentes en sus selvas. No sé si se habla más de lo que se hace, pero de lo que si estoy seguro es que reportará muchos beneficios a nuestra industria en los próximos años.
P: Por último, ¿qué áreas considera que tendrán mayor crecimiento o mayor importancia en un medio y largo plazo? ¿La sostenibilidad ha venido para quedarse?
R: Desde mi punto de vista digitalización y sostenibilidad van de la mano y serán los dos pilares sobre los que deberá sustentarse una nueva industria de la construcción con mayor eficiencia, valor añadido y trazabilidad, que redundará en el beneficio de la sociedad. Esta nueva forma de trabajar no solo ha venido para quedarse, sino que será fundamental en el devenir de la humanidad, ya que el desarrollo de infraestructuras influye directa o indirectamente en la consecución de casi tres cuartas partes de las metas fijadas por Naciones Unidas a través de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
Finalmente, solo nos resta agradecer al Dr. González Yagüe su amabilidad y disponibilidad para atenderla llamada de la Catedra Krystaline-UMH, brindándonos la oportunidad de conocer de primera mano sus valiosas opiniones y poder trasladarlas a todo el sector.